Homenaje a Raúl Reyes. Un hombre de guerra que murió en combate.

Estoy seguro que mucha gente ajena a la causa revolucionaria e insurgente que vive el pueblo colombiano desde hace más de medio siglo, se estará preguntando ¿quién es ese señor que está ahí sentado empuñando un fúsil? Ese señor es Luis Édgar Devia Silva, más conocido como "Raúl Reyes", que nació el 30 de septiembre de 1948 en el municipio de La Plata, departamento del Huila. Marxista por convicción, se inició en el movimiento sindical mientras trabajaba para una planta de leche de Nestlé en la provincia del Caquetá, antes de unirse a las FARC en la década de los 70. Cuando se incorporó al grupo subversivo lo hizo en el frente tercero, bloque armado que operaba en el departamento del Huila y rápidamente ganó poder y se convirtió paulatinamente en alguien influyente dentro de la organización subversiva o como él mismo la llama "movimiento insurgente". Reyes logró un ascenso tan rápido en las FARC que se convirtió en la mano derecha de Manuel Marulanda Vélez, conocido como ‘Tirofijo’ y máximo jefe del grupo subversivo.
Raúl Reyes colgó el vestido de guerrillero y su fúsil para ponerse el traje de chaqueta y corbata para negociar los procesos de paz en el ámbito internacional; por lo que viajó por todo el mundo entrevistándose con diversos mandatarios europeos y de paso predicando que las FARC no son un grupo terrorista como la comunidad internacional piensa. Fue el portavoz y negociador de las FARC en los frustrados diálogos de paz en la zona desmilitarizada del Caguán, en el sur colombiano, entre enero de 1999 y febrero de 2002 cuando estaba Andrés Pastrana en el gobierno. Raúl Reyes fue en todo caso un insurgente y guerrillero revolucionario colombiano que llevó los ideales políticos de las FARC hasta las últimas consecuencias.

Como hombre de guerra que fue, murió en combate luciendo una camiseta blanca en la que se conmemoraba recientemente los 40 años del movimiento insurgente liderado por el guerrillero Manuel Marulanda Vélez.

Estoy seguro que la muerte de Raúl Reyes, no tendrá ningún efecto en el proceso de paz que tanto ansia el pueblo colombiano.